lunes, 30 de mayo de 2005

Poesía, blues y compromiso

La poesía de Langston Hughes, una de las principales voces de la poesía negra estadounidense, estuvo hace unos meses en boca de todos los americanos. Esto porque un verso suyo es el eslogan de la campaña del demócrata John Kerry en su camino hacia la Casa Blanca, hecho que solamente acrecienta la fama de una de los artistas más representativos de la cultura negra en Estados Unidos.
Cuentan en Estados Unidos que John Kerry, el ya derrotado candidato demócrata para derrocar a George W. Bush de la presidencia, buscó en los anales de la poesía estadounidense algunas líneas que lo ayudaran a definir tanto su campaña, así como el papel que a él le cabría en ella. Su staff, en un trabajo no poco arduo de revisión de poetas y poemas, finalmente dio con el pasaje apropiado: “Let America be America again” (dejad que América sea América otra vez). El verso, compuesto en 1938, tenía que cumplir no solamente el ser la “idea fuerza” de la campaña demócrata, sino que también debía de tener el suficiente poder para convencer a la ciudadanía de que estaban transitando por el camino equivocado. A pesar de que en EE.UU. se ha criticado el origen estalinista del poema, Kerry se ha mantenido e incluso fortalecido en su propuesta de Let America be America again, y siguió: “Dejad que América sea América otra vez. Permita que sea el sueño que era”, para aquellos que “sudan y sangran, para aquellos que creen y sufren, para los que tienen la mano en la forja, para aquellos que han arado en la lluvia, debemos traer nuevamente nuestro poderoso sueño.” James Langston Hughes (1902-1967) fue el autor de este verso, y de mucha otra poesía. Nacido en 1902, en Joplin, Missouri, desde sus primeros años como poeta abrazó el compromiso de escribir una poesía íntimamente ligada a lo afroamericano. El árbol genealógico de Hughes apoyaba esta inclinación inclaudicable, ambos maridos de la abuela de Hughes murieron por la causa abolicionista. De niño sufrió la indiferencia paternal, y su soledad lo condujo a los libros. En 1922 abandonó la Universidad de Columbia, y trabajó en decenas de labores menores. Por aquellos días también viajó al exterior; en un carguero recorrió la costa oeste de África y luego de ello vivió varios meses en París. A su regreso, en 1924, se dio cuenta de que había ganado una no despreciable reputación en los círculos literarios de color, como un poeta talentoso.Hughes alimentó su poesía de diversas fuentes. Walt Whitman y Carl Sandburg fueron una gran inspiración primaria, junto con Paul Laurence Dunbar y el jamaicano Claude McKay. Sin embargo, el influjo más poderoso vino del poeta de Chicago, de hecho Hughes consideró a Sandburg como su “estrella guía”, y fue la puerta de entrada al uso del verso libre, así como la adopción de una estética moderna y democrática. Además de la poesía, Hughes avivó su hoguera poética con música. De hecho, Hughes fue uno de los pioneros en mostrar en su poesía la fusión en palabras del blues y del jazz. Esto se ve en sus dos primeros libros, The Weary Blues (1926) y Fine Clothes to the Jew (1927). Ahí Hughes demuestra su interés por la vida del ciudadano negro, especialmente el de las clases bajas, y a pesar de que recibió ataques desde la misma comunidad intelectual afroamericana, Hughes se dio maña para constituirse como una de las fuerzas mayores del Renacimiento de Harlem. En un ensayo-manifiesto de 1926 señaló la necesidad de que el artista mantenga una independencia y un orgullo racial.Muy acorde con su compromiso racial, Hughes volvió a la universidad, en este caso a la Lincoln University, en Pennsylvannia, un tradicional plantel de color, del que se graduó en 1929. Antes, en 1927, conoció a Charlotte Mason, que se transformó en su protectora, y que le supervisó en la escritura de su novela Not Without Laughter (1930). De corte autobiográfico, el libro cuenta la historia de un niño del midwestern, sensible y solitario, y su vida en una familia esforzada. Para el tiempo en que apareció la novela, la relación de Hughes y Mason culminó, al caer el poeta en un período de infelicidad y depresión.Una consecuencia de este período oscuro fue la radicalización de la postura izquierdista de Hughes. Durante 1932 viajó y permaneció un año en la Unión Soviética, donde escribió su poesía más radical. En 1934, ya en California, escribe la serie de relatos The Ways of White Folks (1934), marcados por el pesimismo en las relaciones racial y el rechazo paternal. Los años siguientes traerían apariciones en el teatro, pues Langston Hughes compuso una serie de obras que se presentaron en Broadway, con éxito moderado. Viajó a Europa, donde residió en el Madrid de la Guerra Civil, y en 938, volvió a su hogar, a Harlem, donde fundó el Harlem Suitcase Theater. En montajes como Don't You Want to Be Free? Hughes logra una mezcla perfecta de nacionalismo negro, el socialismo y el blues.


Singin’ the blues

Al estallar la segunda guerra mundial, Hughes se trasladó al centro político, e incluso obliteró su pasado de izquierda en su autobiografía The Big Sea (1940), sin embargo mantuvo su compromiso racial, sus ataques a la segregación y su acercamiento al blues. Esto se ve en libros de poesía como Shakespeare in Harlem (1942) y Jim Crow’s Last Stand (1943), así como en la columna que escribió por más de veinte años para el Chicago Defender, donde el protagonista eran los pensamientos de un personaje llamado Jesse B. Simple, quizás su obra de ficción más celebrada. Estas columnas se reunieron en el volumen Simple Speaks His Mind.Eh 1951, Langston Hughes publica Montage of a Dream Deferred, libro que traería una novedad en su poesía, pasando del blues a un ritmo de bebop, que reflejaría la desesperación creciente de las comunidades negras del norte de Estados Unidos, al mismo tiempo que la derecha que aportillaban su carrera mediante el recuerdo de las conexiones de Hughes con ideologías de izquierda. Por esos años la combinación negro y comunista no era muy segura, y en 1953 Joseph McCarthy lo humilló públicamente al obligarlo a hablar acerca de su pasado político. Hughes negó haber sido parte de algún partido de izquierda, pero reconoció que hubo inspiración de esta ideología en su poesía.La carrera de Hughes no fue la misma luego de este episodio. Debió trabajar muy duro para mantener el nivel de prosperidad que antes obtuvo. Buscó en la escena musical el bienestar que el Mccartismo le quitó. Con la obra Simply Heavenly (1957), basada en su personaje de columnas, obtuvo un éxito moderado, que no se repetiría en producciones posteriores, que lo llevaron al fracaso. En 1955 Hughes escribió un libro ilustrado con fotografías de Harlem hechas por Roy DeCarava. El texto, muy bien acogido, contribuyó a sellar definitivamente la fama de Hughes como un conocedor indiscutido de la cultura urbana negra.Los sesenta no trajeron variaciones en la línea poética de Hughes. En 1962 compuso el poema largo Ask Your Mama, donde campean las alusiones a la cultura y músicas afroamericanas, si bien las críticas no fueron auspiciosas, la poesía de Hughes era más aclamada que nunca al interior de la comunidad negra, a pesar de que no gozaba de la misma aclamación al interior de círculos más militantes del Black Power. Su libro The Panther and the Lash, fue publicado póstumamente en 1967, pues Hughes falleció el 22 de mayo de ese año, en Nueva York.

1 comentarios:

Thomas Carvajal dijo...

Muy buen post, me agrada mucho la poesía de Langston Hughes...la articulacion de su palabra con el Jazz y el blues. Y claro, la critica frente al problema social del racismo.